sábado, 4 de junio de 2011

Palabras de Anne Michaels para un domingo

Amor de hermano, parecido a la vieja barca familiar
a la que llamamos lata: abollada, incómoda,
pero todavía capaz de cortar la piel ondeada del lago.

La familia un estudio de placas tectónicas,
un desplazamiento de pliegues.
Algo dentro cambia de sitio; de repente estamos más cerca o más distanciados.

Hay cosas que los hermanos y las hermanas saben,
el tipo de detalles que un espía utiliza
para probar su identidad,
miedos que se deslizan bajo las altas hierbas de la infancia,
cosas que salen más tarde a la luz; y placeres como tucanes,
el peso de su fulgor inclinando las ramas.

Quién sino un hermano es capaz de llamarte desde el otro hemisferio
para leer un pasaje que describe un extraño
salto en la evolución, cuando los reptiles parecían
"mesitas de café forradas de escamas",
el crecimiento de las crías como "un severo caso de delirium
durante el apogeo de la terapia",
y recordar juntos aquellas criaturas a las que tanto habíamos amado,
con sus gruesas extremidades y espaldas como veleros.

La memoria es una selección acumulativa.
Un cable submarino que conecta un continente
con otro,
electricidad que atraviesa la salmuera de la distancia.

Fragmento de "Miner's Pond", de Anne Michaels, traducción de Jaime Priede

12 comentarios:

Libertad dijo...

Qué maravilla de poema. Tengo que buscar ese libro.

Besos!

Lara dijo...

El libro es El peso de las naranjas & Miner's Pond, editado en Bartleby Editores.
Muchos besos!

Emily dijo...

es una de mis poetas favoritas, si no mi favorita
¿has leído "buceadores de la piel"? (también en bartleby) es genial.

beso :*

mariona dijo...

Australia Press quiere declaraciones directas y no citas. Ya sabe usted, los periodistas de hoy en día son muy morbosos.

Lara dijo...

No, Emily, solo leí este. Y una novela suya también. Besos!

Jejeje: Australia Press tendrá declaraciones en privado, por ahora...

Besazos!

trovador errante dijo...

Sútil y claro como se describen esos movimientos, son tal cual, cuando la sangre solo con mirarse de reojo ya se entiende...que haría yo si mi hermanita no viviese a mi lado...y mis niñas...que solo con pensar en ellas se me pone una sonrisa tierna de oreja a oreja...

Australia press in private...but yours fans need more from you...;-)

Besos!
Kike

Libertad dijo...

Gracias!

Sonsoles dijo...

Oh, non connosco...

Isabel dijo...

No he podido experimentar en carne propia, lo que con tanta exactitud describe. Pertenezco a ese cielo-infierno de los hijos únicos, pero sí lo he visto y comprobado en otros.
Gracias, porque siempre nos nutres de palabras bellas y certeras.

Besos llenos de ternura para las dos.

NáN dijo...

recordar juntos es cosa de hermanos. En cualquier momento te sale un hermano y te desaparece otro. Siempre hay alguien que se mezcla con tu infancia, aunque sea en los sueños, y ya tienes un hermano.

Gemma dijo...

Lo que dice Nano es cierto. Hay amigos que un día se revelan como hermanos, y hermanos que de pronto dejan de serlo.

Sea como fuere, esa indagación que lleva a cabo la poeta es exacta como el protagonismo de todos esos saurios deambulando por la infancia.
Muchos besos!

Recaredo Veredas dijo...

Buf, qué poema más bueno. Voy a buscar el libro.