Nueve. Ahora me toca a mí
Antes de ayer le leí un cuento por primera vez.
(En ocasiones leo en voz alta mis lecturas, pero eso es distinto; eso se parece más a la locura o a la soberbia de pensar que se enterará de algo, que le importará.)
El de antes de ayer era un cuento para ella, especial. No sé si me hizo mucho caso, pero me late el corazón de impaciencia por el mundo nuevo (y viejo) que se abre ante mí.
8 comentarios:
Me alegro de tu espectativa, tenerla es saber que vas a disfrutarlo.
Besos y besitos.
La portada de ese libro es mucho más bonita con esos dedos agarrándola.
Y que no deje de latir Lara, ni tu de sacarle fotos a las manos ni las tuyas de contarlo. Un beso!
Eso entra en la columna del Haber, la de los Hechos Extraordinarios que se me permite vivir.
A explorar el territorio fecundo de la imaginación (qué suerte tener una excusa, jajaja). Beso.
Todo un mundo.
Que te lata, que te lata siempre.
Un beso.
:D
Qué fuerte, Lara!
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