viernes, 30 de septiembre de 2011

Palabras de César Vallejo para Roberto Terán




Epístola a los transeúntes

Reanudo mi día de conejo,
mi noche de elefante en descanso.

Y, entre mí, digo:
esta es mi inmensidad en bruto, a cántaros,
este mi grato peso, que me buscara abajo para pájaro;
este es mi brazo
que por su cuenta rehusó ser ala,
estas son mis sagradas escrituras,
estos mis alarmados compañones.

Lúgubre isla me alumbrará continental,
mientras el capitolio se apoye en mi íntimo derrumbe
y la asamblea en lanzas clausure mi desfile.

Pero cuando yo muera
de vida y no de tiempo,
cuando lleguen a dos mis dos maletas,
este ha de ser mi estómago en que cupo mi lámpara en pedazos,
esta aquella cabeza que expió los tormentos del círculo en mis pasos,
estos esos gusanos que el corazón contó por unidades,
este ha de ser mi cuerpo solidario
por el que vela el alma individual; este ha de ser
mi hombligo en que maté mis propios natos,
esta mi cosa cosa, mi cosa tremebunda.

En tanto, convulsiva, ásperamente
convalece mi freno,
sufriendo como sufro del lenguaje directo del león;
y, puesto que he existido entre dos potestades de ladrillo,
convalezco yo mismo, sonriendo mis labios.

*Vallejo hacía uso libre de la ortografía, como se puede ver.

Recogido en César Vallejo, Obra poética completa, "Poemas humanos", 
Alianza Literaria, 1999

11 comentarios:

Rober dijo...

!!!!

Rober dijo...

Muchas gracias por el regalo.

Dylan Forrester dijo...

Vallejo, noble compatriota, siempre certero y entrañable.

Besos :)

NáN dijo...

hermosa convalecencia.

J. G. dijo...

la foto es potente

AROAMD dijo...

"mi inmensidad en bruto"

todos sabemos un poco qué es eso

trovador errante dijo...

Guuuaaaauuuu....

Lara...gracias!

(Qué gusto leerte los domingos)

Besos,
Kike

N.M. dijo...

:)

Isabel dijo...

Inmenso.

Gracias y besos.

manolotel dijo...

Dan ganas de hacerse poeta leyéndolo.

Tener entre los brazos ese otro tiempo de quien aún no sabe usarlo.
Pensarle con cada célula, sentirlo, soñarlo, encontrarle sentido a cada movimiento, sufrir y disfrutar. Aprender el tacto de un osito imprescindible. Mezclarlo todo. Una maravilla.

Dan ganas de volver.

Besos y uno pequeñito nuevo y verde.

VELARIÁ (Luis Patricio Vela Arias) dijo...

Si que bestia, una masa está